Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
© 2025 Diseño Web por: Altomarketing